miércoles, 1 de enero de 2020

Los murciélagos de Matanzas

La provincia de Matanzas se reconoce por sus primicias históricas, las arenas de la playa de Varadero, las aguas color turquesa de la bahía, la Cienaga de Zapata o las Cuevas de Bellamar; pero Matanzas no es reconocida por sus murciélagos, y debería. Veintiséis especies – que representan las seis familias de quirópteros registradas en la isla - convierte a la región de Matanzas en uno de los focos más importantes del archipiélago para la conservación de este importante integrante de nuestra fauna.

Murciélago frutero Artibeus jamaicensis junto a las pictografías aborígenes
de la Cueva de Ambrosio, Varadero. Importante polinizador y distribuidor de semillas.

Los murciélagos son un grupo diverso y peculiar del reino animal. Es el único mamífero capaz de volar gracias a sus dedos y patas unidas por sedosas membranas – en algunos casos velludas. Los murciélagos que habitan Cuba y el Nuevo Mundo son del grupo de los micro quirópteros o micro murciélagos; un grupo de murciélago pequeños que se especializan en el uso de ecolocalización – una forma sofisticada de sonar - ecos que utilizan para volar y capturar presas en el vuelo, tal y como más o menos usan los delfines y los submarinos. Existen murciélagos que comen frutas, polen, semillas, otros vertebrados y hasta sangre, pero la mayoría son insectívoros.


En uno de nuestros últimos trabajos investigativos, publicado por la revista científica Novitates Caribaea, presentamos un novedoso catalogo de localidades de colecta de murciélagos de la provincia de Matanzas, en adición a otras localidades puntuales de nuestro archipiélago. Entre los nuevos aportes hay una cuarentena de nuevas localidades, y múltiples nuevos reportes o registros de especies raras, localmente extinguidas – conocidas únicamente por restos fósiles – y otras, importantes integrantes de la quiropterofauna local. Para ello fue necesario una recopilación de datos que se extienden desde el siglo XIX hasta nuestros días, construido sobre el pilar que es la obra magistral de murcielaguero mas reconocido de Cuba, Los Murciélagos de Cuba del Dr. Gilberto Silva Taboada.

Aquí dejamos el resumen del articulo:

“Se hace una actualización del registro de murciélagos para la provincia de Matanzas, Isla de Pinos y zona central de Cuba, basada en reportes paleontológicos y neontológicos de un total de 97 localidades de colecta. Para la provincia de Matanzas reportamos 27 especies - de las 34 registradas entre extinguidas y vivientes, representando un 79 % de la quiropterofauna conocida y más del 84 % de las especies vivientes del archipiélago cubano. Las especies en alto riesgo de extinción Antrozous koopmani y Natalus primus, aunque localmente extintas en la provincia - como en la gran mayoría de la isla - presentaron un registro fósil que sugiere una mayor distribución que perduró hasta el Holoceno tardío (postcolombino). Las especies extinguidas endémicas Artibeus anthonyi y Phyllops vetus se reportan oficialmente por vez primera para Matanzas. Además, se actualizan y expanden los registros de Phyllops falcatus, Lasiururs pfeifferi, Lasiurus insularis, Chilonatalus macer y Eumops ferox. Las nuevas localidades y registros hacen de la región de Matanzas la segunda provincia de mayor diversidad e importancia quiropterologica del archipiélago cubano, distinguiéndose como un área de considerable potencial para la conservación de los murciélagos de Cuba.” 

Monophyllus redmani: murciélago común en la región que se alimenta de polen y néctar: importante polinizador.

La elevada diversidad de murciélagos en nuestra provincia se debe a que el archipiélago cubano no posee grandes barreras geográficas o geo-ecológicas, como lo pueden ser vastos desiertos y cadenas montañosas muy elevadas. Al contrario, nuestra isla se caracteriza por terrenos bajos que raramente sobrepasan los 400 metros de elevación, con cadenas montañosas orientadas de este a oeste, paralelas al eje direccional de la isla. Aunque existen sierras elevadas, estas no sobrepasan los 2000 metros (el Pico Turquino en la Sierra Maestra se eleva a solo 1974 metros; compárese con los 3098 m del Pico Duarte, en La Española) y las zonas desérticas son pequeñas y restringidas localmente. Estos factores permiten una distribución geográfica homogénea de mamíferos terrestres – incluidos los volantes murciélagos – a través de todas nuestras provincias. 

Macrotus waterhouseii en vuelo. Este es un murciélago insectívoro grande y orejudo,
que puede consumir un ¡tercio de su peso corporal en insectos en solo una noche!

A pesar de ello, la región de Matanzas ha jugado un papel principal en el estudio de los murciélagos de la isla. Desde el siglo XIX, fue en esta región se descubrieron, describieron y nombraron varios de los murciélagos mas conocidos de Cuba y de las Antillas. Entre ellos están Pteronotus parnellii, Pteronotus quadridens, Phyllonycteris poeyi y Tadaria brasiliensis (varicion musucula). Hazaña
y uno de los grandes aportes de naturalista alemán Johannes Gundlach, quien residió en varias partes de Matanzas, donde condujo sus colectas e investigaciones. Hoy, ese impulso investigativo lo conducen grupos de aficionados e investigadores de la Sociedad Espeleológica de Cuba y el Proyecto CUBABAT bajo la dirección de especialistas y de la población involucrada.

La información que estas investigaciones recogen ayudan a entender mejor a los murciélagos. Estos pequeños mamíferos voladores son esenciales para el balance ecológico natural, no solo de nuestro archipiélago. Con su consumo de insectos dañinos para la agricultura y la salud, dispersión de semillas y producción de guano fertilizante, los murciélagos comprenden un útil y beneficioso componente de nuestra fauna.



Cita recomendada:

Orihuela, J., L. W. Viñola López, & R. A. Viera Muñoz (2020). New bat locality records from cuba with emphasis on the Province of Matanzas (Nuevas localidades y registros de murciélagos para Cuba, con énfasis en la provincia de Matanzas). Novitates Caribaea 15: 96-116.